Gibraleón despidió el año con frutos rojos en una multitudinaria fiesta

La localidad de Gibraleón ensayó el Fin de Año con una multitudinaria fiesta que tuvo lugar en la tarde y noche del sábado en la plaza de España y que comenzó con exhibiciones de los alumnos y alumnas de la Escuela Municipal de Baile.

El momento más espero, y que llenó por completo el también conocido como Paseo, llegó a las 20.18 horas, cuando sonaron las 12 campanadas de la suerte, y los olontenses tomaron frutos rojos para brindar por el año entrante.

La alcaldesa, Lourdes Martín, se mostró satisfecha del amplio poder de convocatoria que había tenido la iniciativa, en la que también se incluyeron fuegos artificiales así como un baile final en el que sonaron algunas de las canciones más conocidas de las últimas décadas.

Las expectativas se vieron sobrepasadas con creces, lo que hizo que se agotasen las 1.200 tarrinas de frutos rojos que se habían preparado para la ocasión.