Los rocieros de Isla Cristina saludan al Cristo de la Sangre de Gibraleón

Como cada año, los rocieros de la Hermandad de Isla Cristina han hecho en la tarde de este martes su parada obligada ante la iglesia del Carmen de Gibraleón para ofrecer flores al Cristo de la Sangre.

Directivos de ambas hermandades se han fundido en un abrazo y los olontenses han deseado a los isleños un camino plagado de buenas vivencias.

La filial isleña, que inició su camino ayer lunes, pernocta hoy en el recinto ganadero de la localidad olontense.