Ni el mal tiempo ni el cambio de emplazamiento, precisamente debido a la lluvia, nada consiguió deslucir la V 
Degustación de Mosto ‘Ciudad de Cartaya’, que se celebró el sábado en el Pabellón de Exposiciones del Recinto Ferial, que registró un lleno absoluto para la ocasión.
El nuevo escenario, resultado de la previsión meteorológica, puesto que esta iniciativa se viene desarrollando en la Plaza Redonda, permitió que pudiera celebrarse un evento que ya había tenido que ser postpuesto el fin de semana anterior debido a la lluvia, y que a pesar de las inclemencias meteorológicas, resultó todo un éxito, según ha valorado hoy el Ayuntamiento de Cartaya, organizador de la iniciativa, junto con más de una treintena de bodegueros de la localidad.
La afluencia de público fue importante, y la popularmente conocida como “Feria del Mosto” se desarrolló en un ambiente festivo, atrayendo un año más a numerosos/as cartayeros/as, que pudieron probar los caldos locales y 
acompañarlos de las tapas propias de la gastronomía de la localidad con la que los bodegueros obsequiaron a los asistentes”. Así lo destacó el alcalde, Juan Miguel Polo, que, acompañado por el concejal de Festejos, Manuel Barroso, y la concejala de Ferias, María Isabel Pérez, hicieron entrega a los participantes de un recuerdo, en reconocimiento por su colaboración a la hora de hacer posible esta degustación, y también por su importante labor de cara al mantenimiento y realce de una tradición muy cartayera que el colectivo ha sabido transmitir de padres a hijos”.
Especialmente emotivo fue el homenaje que se le rindió a uno de los bodegueros con más tradición en la localidad, José Delgado Hachero, al que este año el Ayuntamiento le ha concedido una distinción especial “por su labor en la producción y en el mundo del vino en Cartaya”.
Entre los aspectos a destacar en esta edición mencionar una gran paella y la música en directo, elementos con los que el Ayuntamiento contribuyó a animar la degustación, pero sobre todo la continua participación de jóvenes bodegueros, que, en su mayoría heredan esta tradición de sus padres y abuelos, y han apostado por continuarla, “con lo que hemos podido comprobar en cada una de las mesas dispuestas, cómo distintas generaciones de una misma familia daban a probar sus caldos a los asistentes, lo que garantiza la pervivencia de esta tradición en la localidad”, según resaltó Barroso.
Finalmente, recordar que el objetivo con el que nació esta iniciativa hace ahora cinco años era el de volver a las raíces bodegueras de la localidad y celebrar una jornada de convivencia y reconocimiento a la labor de quienes mantienen estas raíces, algo que, según María Isabel Pérez, “estamos consiguiendo, como lo demuestra la continua afluencia de público edición tras edición, incluso haciendo frente al mal tiempo, como este año”.
