La Guardia Civil libra a sus mandos del control de alcohol y drogas, según denuncia la AUGC

Los agentes de la Guardia Civil, menos los oficiales, tendrán que someterse a controles de alcoholemia y drogas, según una nueva orden que firmará la vicepresidencia del Gobierno, ha adelantado el Plural.com.

Estos controles se efectuarán, señala el digital, si existe "sospecha fundada de consumo habitual" y se harán a propuesta del jefe de unidad, quedando exentos de estas pruebas los oficiales. Además, se considerará consumo excesivo de alcohol cuando se sobrepase la tasa de alcohol en sangre de 0,3 gramos por litro o de alcohol en aire espirado de 0,15 miligramos por litro, que es la medida que se tiene en cuenta en el caso de los conductores noveles.

Estos controles se realizarán dentro del horario de servicio de los agentes, durante las cuatro horas anteriores al inicio de ese servicio o inmediatamente después de su finalización, cuando se encuentren vistiendo el uniforme o cuando la conducta de un guardia civil afecte a la imagen del Cuerpo y si el agente se negara a someterse a ella, se le aplicará el régimen disciplinario de la Guardia Civil.

Esta medida se aplica, según el Ministerio de Presidencia, por las características especiales de este trabajo en el que, entre otras cosas, incluye portar un arma.