Trinidad Banda o los vestidos de flamenca más cómodos para romerías y caminos

"No es el típico traje de flamenca", comenta uno de los dependientes de Trinidad Banda. Tiene toda la razón. Los patrones de esta marca onubense están cortados pensando en la comodidad y la libertad de movimiento, lo que en moda flamenca ha sido durante décadas justo al contrario, imperando siluetas que estrechan al mínimo la cintura y con un entallado que sigue las curvas de la mujer al milímetro.

La historia de la marca, está estrechamente ligada con su fundadora. Trinidad Banda estudió Diseño en Sevilla y abrió su tienda epónima en Huelva en 2015. Pero no fue hasta 2019 cuando se dedicaría de lleno al diseño y confección de trajes de flamenca.

Nuestros diseños de flamenca son ligeros, coloridos, únicos y no hechos en serie.

-Trinidad Banda

Sus trajes se reconocen por una marcada estética que prevalece temporada tras temporada: tiros altos, muchas nejas y tejidos flexibles como la lycra; en definitiva, elementos que los hacen idóneos para convertirse en trajes para llevar en romerías y caminos. De hecho, según apunta la fundadora: "la gran mayoría de las prendas son para romerías, no para ferias".

Entre las siluetas de su nueva colección destacan, en su mayoría, vestidos con cortes y vuelos desde la cintura, faldas ligeras y trajes amplios que permiten a las flamencas moverse y disfrutar a cada paso de baile.

Además, sus diseños flamencos "no hechos en serie", están confeccionados artesanalmente con materiales como la lycra, de características flexibles, elásticas y de gran resistencia, aportando soporte y confort.

Otra de las señas de identidad de sus piezas, son sus mangas, siempre ligeramente abullonadas en el hombro. También son tendencia las mangas estrechas sin volantes o las mangas con volúmenes más definidos como las "estilo jamón" o las mangas farol.

En cuanto a la gama cromática de esta temporada, la diseñadora concede que en esta colección ha apostado por los colores fuertes: "Hemos trabajado mucho los tonos malvas, corales y los grandes clásicos como el blanco y el negro". Y también por las combinaciones de colores como como el mostaza, el salmón y el fucsia, que se yuxtaponen en una sola pieza en perfecta armonía.

Desde hace varias temporadas, se recupera la tendencia del piquillo. Parecido al mantón, este es un elemento complementario al traje o falda de flamenca que se coloca sobre los hombros al estilo de las canasteras y que ofrece un "remate estético" a los estilismos flamencos.

Así una falda de lunares, puede combinarse con un body simple, pero añadiendo a la fórmula un piquillo a juego para conseguir un look flamenco redondo.