Piden unas Colombinas sin ruido para que los niños con autismo puedan acudir

El concejal y candidato de Creo en Huelva, Ruperto Gallardo, quiere que los niños con Trastorno de Espectro Autista (TEA) puedan disfrutar de las Colombinas o las fiestas de la Cinta igual que cualquier otro. “Para un niño con estas características, un entorno como las Colombinas puede ser aterrador” señala. “Las luces, la música fuerte y los gritos, que son normales en la zona de los cacharritos de cualquier feria, suponen una situación de estrés para personas con TEA. Un niño hipersensible va a escuchar un ruido como si fuera por un altavoz, así que imaginemos lo que deben sentir en este entorno...”.

Efectivamente, los TEA afectan de forma diversa a cada persona que los sufre, pero se caracterizan en general por la dificultad para procesar la información del entorno, ya sea auditiva, visual o táctil. En la mayoría de los casos, los niños se sienten bombardeados por la información que reciben de sus sentidos. Ese trastorno en el procesamiento sensorial causa problemas de aprendizaje, conducta y coordinación y afecta a sus relaciones sociales, a su autonomía personal, a sus habilidades para el juego y a su misma capacidad de comunicarse. Como indica Gallardo en su moción, “una feria, donde reciben estímulos sensoriales por todos los canales de forma continua y agresiva, puede convertirse en un infierno para un niño o niña con TEA. Las luces, la música y los gritos, que en cualquier persona generan un estado de excitación, pueden provocar un efecto devastador en un pequeño con TEA, en palabras de familiares de estos niños, llegando a provocar crisis de ansiedad, bloqueos, ataques de pánico e incluso dolores”.

Otros municipios, como San Pedro de Alcántara (Málaga) o Sevilla ya han tomado medidas, implantando “horas sin ruido” en sus ferias, para hacerlas accesibles a estos niños. “Mi propuesta trata de implantar una medida similar en Huelva” incide Ruperto Gallardo. “Dos o tres horas, antes de que anochezca, sin luces intensas ni sonidos en los cacharritos permitirán que estos niños disfruten de los mismos como niños que son. Los responsables de estos negocios ya han mostrado su total disposición a colaborar en otras ciudades, por lo que no me cabe duda de que en Huelva será igual”.