La Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, a través del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) está respaldando desde el pasado mes de octubre un total de 12 proyectos en la provincia de Huelva dentro del programa ‘Apoyo a mujeres en los ámbitos rural y urbano’, dirigido a facilitar la incorporación laboral de 626 mujeres, principalmente residentes en municipios menores de 5.000 habitantes y con un presupuesto provincial de 1.391.090 euros. Estas mujeres, con necesidades de cualificación o recualificación formativa o profesional, recibirán una ayuda de 515 euros cada una, una vez finalizada su participación en un itinerario.
En concreto, según ha informado el delegado de Empleo de la Junta en Huelva, Alberto Santana, “el criterio es beneficiar al colectivo femenino desempleado del medio rural y urbano, con un mínimo de 127 inserciones laborales, al menos de tres meses, para lo que contamos con el trabajo que están desempeñando un total de 12 entidades promotoras repartidas en 40 municipios onubenses. El objetivo es promover la atención personalizada a las mujeres a través de su participación en itinerarios individualizados, que combinen acciones de diferente naturaleza, tales como orientación laboral, asesoramiento, formación, inserción laboral y acompañamiento en el empleo".
En este sentido, con la intención de valorar la evolución y nivel de ejecución de las 12 iniciativas, Santana ha visitado a la “Asociación Caminar” en la capital, donde ha sido recibido por su junta directiva y con quienes ha tenido ocasión de conocer cada una de las actividades y gestiones emprendidas por la entidad que en estos momentos atiende a 75 mujeres beneficiarias de los municipios de Villanueva de los Castillejos, El Almendro, Puebla de Guzmán y usuarias de la Asociación residentes en la capital y para lo que cuenta con un respaldo económico de 166.125 euros.
Según ha detallado Santana en la sede de “Caminar” “este programa incluido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, no solo trata de romper techos de cristal, sino que contribuye al desarrollo local ya que persisten muchas desigualdades en el ámbito rural. Es evidente que sigue siendo necesario avanzar, para facilitar el acceso a la formación, las TIC y romper con la brecha digital que todavía existe, y buscar oportunidades dentro de cada una de las poblaciones, aprovechando al máximo posible cada uno de los recursos para poder incorporarse al mercado laboral y la vista puesta en la igualdad de oportunidades.”
