La Cuenca Minera en contra del vertedero de Nerva: "No queremos ser la cloaca de Europa"

A.J.S.

El vertedero de Nerva, gestionado por la empresa DSM, ha comenzado a recibir parte de las 12.000 toneladas de residuos tóxicos que habían llegado al puerto de Sevilla en dos buques provenientes de Montenegro (Yugoslavia) pese a la oposición de ayuntamientos de la Cuenca Minera, organizaciones ecologistas y formaciones políticas.

En concreto, medio centenar de camiones ha comenzado a trasladar este jueves a dicho depósito las 5.583 toneladas de residuos trasladados por el buque Muzzafer Bey.

Mientras tanto, el PSOE ha registrado en el Parlamento andaluz una iniciativa para el cierre del vertedero y el equipo de gobierno del Ayuntamiento nervense llevará a Pleno municipal una declaración de no interés público del depósito para iniciar el expediente para su clausura.

Por su lado, la directora general de Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Junta, María López Sanchís, ha asegurado que "la competencia en el traslado de residuos procedentes de países no comunitarios es del Ministerio para la Transición Ecológica" y ha pedido al delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, que "deje de manipular a la opinión pública, se estudie la ley y reconozca las competencias del Ministerio".

"Ninguna comunidad autónoma tiene competencias para autorizar el traslado de residuos procedentes de países no pertenecientes a la Unión Europea", ha incidido en una nota.

A este respecto, la empresa que gestiona el centro de residuos ha asegurado que "cumple rigurosamente la ley" y presta "un servicio esencial a la industria andaluza", según ha explicado la compañía en una nota de prensa.

Asimismo, la compañía ha destacado que "este movimiento de residuos está aprobado por las autoridades competentes de origen -Agencia Medio ambiental de Montenegro- y de destino -Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico- cumpliendo absolutamente toda la normativa legal de aplicación".

Para la tarde de este viernes se ha convocado por parte del sector ecologista una concentración en señal de rechazo a este vertedero. "No queremos ser la cloaca de Europa y de fuera de ella", señalan vecinos de la localidad nervense.