Crimen Almonte: Los criminalistas no hallaron restos de ADN del acusado en la vivienda

Agentes del Servicio de Criminología de la Guardia Civil, licenciados en Biología, han asegurado este jueves que no hallaron muestras de ADN del acusado por el doble crimen de Almonte en la casa donde aparecieron los cadáveres de una niña de ocho años y de su padre en abril de 2013.

Dos de ellos han señalado, durante su declaración de este jueves, que realizaron hasta un total de cinco informes de muestras remitidas por la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, en cuyo traslado, han asegurado en el juicio que por esta causa se celebra en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva, se respetó en todo momento la cadena de custodia. En este sentido, uno de los agentes ha apuntado que en unas toallas que había en la casa, aparece "ADN de las víctimas y de la mujer y madre de ambas, y ningún otro perfil".

Los agentes han remarcado que no sólo se analizaron aquellas zonas de los objetos remitidos en los que se advertían manchas, también otros puntos en los que éstas se advertían con la luz usada en laboratorio e incluso de zonas en las que no se percibía nada.

En este punto, han puesto como ejemplo que de una de las colchas de la vivienda se analizaron hasta un total de 164 muestras.

Por su parte, a preguntas de la Defensa se han reiterado en que "en ninguno de los cinco informes realizados recogieron la muestra indubitada del detenido ni al cotejarla con la base de datos dio positivo".

Un perro de la Guardia Civil detectó sangre en el coche de FJM

Por otra parte, uno de los agentes de la Guardia Civil declaró este miércoles que uno de los perros del equipo de Detección y Localización de Restos Biológicos había detectado sangre humana en el coche del acusado en mayo de 2014, es decir, un año y un mes después de los asesinatos de Miguel Ángel y su hija. El agente ha asegurado que el perro “no se equivoca” y que realizaron diferentes pruebas en las que el resultado siempre fue el mismo: el animal marcaba restos de sangre de los fallecidos en el maletero del coche.

Otros dos agentes han declarado que tras la primera inspección ocular del vehículo no encontraron nada, pero que hallaron siete muestras tras el rastreo del animal. Además, los agentes criminalistas afirman que las botas requisadas al acusado podrían coincidir con las huellas de la escena del crimen, por la marca y el número de pie coincidente.

Por otro lado, otro agente ha confirmado que el autor del crimen “fue solo una persona” y que los rastros de sangre indican que hubo “oposición al ataque” y “desplazamiento”.