La Guardia Civil detuvo el pasado 15 de febrero, a una tercera persona como presunta autora del homicidio de un anciano de 78 años de edad, ocurrido a principios del mes de mayo, en la localidad costera de Matalascañas. En el mes de septiembre fueron detenidos dos varones de nacionalidad de rumana, relacionados con los mismos hechos, y que se encuentran en prisión cumpliendo condena, según ha confirmado hoy la benemérita.
Las investigaciones se pusieron en marcha a través de la colaboración ciudadana, siendo los vecinos del anciano, los que alertaron a la Guardia Civil, porque hacía varios días que no lo veían.
En el mismo momento en que se recibió el aviso, se activó el protocolo de actuación establecido para la localización de personas desaparecidas.
La entrada en el domicilio se llevó a cabo durante la tarde del 15 mayo, hallando los agentes, el cuerpo sin vida y con signos de violencia extrema, del supuesto desaparecido.
Tras casi 5 meses de investigaciones y un minucioso análisis del lugar donde ocurrió el crimen, fue durante el pasado mes de septiembre, cuando se pudo identificar, localizar y detener a dos de los presuntos autores de la muerte, aunque la operación no quedó cerrada y no se descartaban nuevas detenciones.
Finalmente los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Huelva, Grupo de Delitos contra las Personas, tras nuevas indagaciones y pesquisas, han detenido a una tercera persona, en la localidad de Tres Cantos (Madrid) que también habría participado en la muerte del anciano.
A la detenida, una mujer de nacionalidad rumana y que responde a las siglas de O.G.L. de 26 años de edad, se le imputan los delitos de Homicidio y Robo con violencia e intimidación y ha quedado a disposición del Juzgado número 3 de La Palma del Condado junto con las Diligencias Instruidas.
Por la autoridad judicial se ha levantado el secreto de las actuaciones y ha decretado la prisión preventiva de la detenida.
Los otros dos detenidos tenían múltiples antecedentes por delitos violentos y el más joven de los autores, se encontraba ya en prisión por otro robo con violencia, ocurrido en la localidad de Gibraleón en la madrugada del 4 de abril de 2015, en el que los ladrones, empleando una violencia extrema, maniataron, amordazaron, amenazaron y golpearon a un matrimonio de septuagenarios; los cuales sufrieron lesiones físicas graves y secuelas psicológicas difíciles de superar por el sufrimiento al que fueron sometidos.
Igualmente en este crimen, sometieron a la víctima a gran cantidad de golpes y agresiones corporales de resultados graves, maniatándolo, consiguiendo un estado de vulnerabilidad e indefensión de la víctima que le provocó una muerte violenta.
La investigación sigue abierta no descartando la participación de más autores, siendo el proceso investigativo laborioso y prolongado en el tiempo.
