Cerca de 37 toneladas de sardinas han sido incautadas en aguas de Portugal por parte de la Guardia Nacional Republicana (GNR) en diversas actuaciones que se llevaron a cabo entre el 3 de junio y el 12 de octubre.
La mayor parte de las incautaciones se debe, según señalaron fuentes policiales, al incumplimiento de la normativa de pesca y, más en concreto, por excederse en la cuota de captura establecida para dicha especie.
De dicha cuantía, más de 28.5 toneladas, han sido donadas a diversas organizaciones benéficas del país.
Con este tipo de actuaciones policiales se trata de garantizar, según la GNR, la sostenibilidad ambiental, económica y social del caladero.
"Es un recurso de interés estratégico para la pesca portuguesa, la industria conservera y las exportaciones de productos pesqueros y marinos, y es de especial relevancia socioeconómica en varias comunidades pesqueras", señaló dicho cuerpo policial.
