
El hecho de que se haya desbocado la cifra de contagios de coronavirus en todo el país no ha logrado frenar a algunas personas que siguen celebrando fiestas y botellones sin mascarillas ni distancia de seguridad entre los asistentes.
Es lo que ha ocurrido este fin de semana en El Rocío, donde pese a encontrarnos en plena pandemia, algunas personas han dado muestras de «insensatez e irresponsabilidad».
Según un vídeo que circula por las redes y del que se ha hecho eco Cuatro, numerosas personas se agolpaban cantando, bailando y bebiendo. «Esto, que es común en la zona, es ahora una irresponsabilidad y un foco de contagio», señala dicho canal.
Y además, se subraya que las reuniones de 20 o 30 personas en casas familiares se suceden en la aldea, donde el problema no es un desconocimiento de las medidas, sino la ignorancia ante un peligro real.
Esta fiesta, celebrada en la madrugada de este domingo, ha provocado la lógica indignación en las redes sociales, donde la Plataforma Ciudadana Por Almonte El Rocío y Matalascañas califica a la aldea como un «pueblo sin ley» y pide al Ayuntamiento que haya cumplir la normativa en la zona.
En cualquier caso, no se trata de un hecho aislado, el presidente de la Asociación de Propietarios de Matalascañas, Juan Gómez Palma, ha asegurado a Huelva Hoy que los botellones siguen produciéndose cada fin de semana en la citada playa.
De igual modo, anuncia que el colectivo mantendrá una próxima reunión después de que sus demandas sigan sin ser atendidas por parte de la alcaldesa de la localidad, Rocío del Mar Castellano (Mesa de Convergencia, exPodemos).
Que pongan buenas denuncias que le duela bien el bolcillo que despues contaminan a los demas
Hasta que no haya «mano dura», acompañada de unas multas en consonancia con el daño que en potencia, pueden causar estas «fiestas familiares», y botellones, no se van a acabar. A esta gente les da igual, mientras el problema no les afecte a ellos directamente. En el momento que les afectara, vendrían los lamentos, el llanto, y el «crujir de dientes». Cuando ya no habría remedio para evitarlo.