“Llevábamos mucho tiempo sin ganar, nueve semanas. Podíamos haber ganado varios partidos entre medias, no se ganó y acabó en esta racha. El equipo tenía que quitarse esa sensación de intentar cosas y que no salieran; a veces dábamos la sensación de no tener intensidad pero no es así. La cabeza en el futbol es muy importan, las rachas son muy dañinas, pero hoy el equipo ha estado unido con la afición”. Con este mensaje empezó Alberto Monteagudo en sala de prensa el balance del triunfo ante el Sevilla Atlético, que significa que el Recreativo vuelve a conocer la victoria diez jornadas después.
El técnico de Valdeganga ha hecho una revolución en el once, haciendo siete cambios permaneciendo solo en el once Diego Jimenez, Borja García, Isi Ros y Quique Rivero. Algo que explicó asegurando que “respecto a como me comporto en los equipos, no suelo tener tantas individualidades en los extremos porque o haces jugada de gol o te hacen una contra generalmente y hoy con Quiles e Isi si la hemos tenido. Gerard nos ha dado posesión, Quiles, cuando está fresco, es muy dañino y hoy hemos visto al Isi Ros que queremos, decisivo. Ha habido un compromiso tremendo de los jugadores y Dios quiera que sea el inicio de una buena racha”.
Monteagudo insistió en una idea que mencionó tras el Badajoz y que hoy se ha dado. Así, dijo que ha sido clave “habernos puesto por delante, dado el estado anímico que tenemos. No hemos tocado fondo pero ha sido una semana muy intensa, casi de tocar fondo, porque era mucho tiempo sin ganar, en el último encuentro en casa contra el Badajoz no estuvimos bien, los jugadores estaban faltos de confianza y, aunque tengas mucha calidad, eso es una losa muy grande". En la misma linea, decía que "ha sido muy importante la fe. También sabíamos cómo hacerle daño al Sevilla Atlético, en los uno contra uno y tratamos de enlazar por dentro con Gerard y desbordar por fuera con Isi.. Además, la línea defensiva ha estado casi el 99% del tiempo a un nivel alto”. Seguía hablando en esta misma linea diciendo que “cuando un jugador hace una carrera de 30 metros, le cuesta volver y si perdemos un balón tenemos que presionar alto para recuperarlo o parar el juego con falta"..
La victoria ha venido acompañado de un mejor juego, muy ligado al estado del césped, impecable. Sobre esto y si cree que la mejoría del verde del Colombino ayude a la mejoría del juego albiazul, comentó el manchego que “sí que debe ayudar. Mi esencia como entrenador no la perderé pero ante todo quiero ganar. Hoy era un partido importante para mi y podía haber metido a dos pivotes pero he puesto a Quique Rivero porque va con mi manera de entender el fútbol. Queremos ganar y si es jugando bien, mejor”, afirmó.
Sin embargo, no todo sería luces y, una vez más, el balón parado sacó las vergüenzas del equipo. “Hemos trabajado esa faceta como no lo hacemos normalmente, con un día exclusivo, pero nos hacen gol y eso nos puede costar muchas cosas, tenemos que mejorarlo porque el menos goleado esta arriba y en esta categoría hay campos en los que sólo puedes ganar a balón parado. Atrás hemos estado bien con Cera ha hecho un partido serio, los centrales han sido ganadores en muchas fases, Nano ha estado bien y este resultado debe ayudarnos a ser más sólidos en esa faceta”, destaca el entrenador recreativista.
Estos tres puntos dan un importante margen de tranquilidad: “Ahora sólo pienso en ganar al Cádiz y contagiar a la gente porque el recreativismo ha dado un paso al frente. Sufro por mi puesto de trabajo pero también por la gente porque, se lo digo a mis jugadores, esta afición no es de un equipo normal de Segunda B ni de Segunda A y esa fidelidad de la afición hay que premiarla porque ha sufrido mucho y merece victorias”.
