Bernardo Montoya mantendrá el próximo día 16 de mayo a las 10.30 horas un careo con su exnovia, ambos por videoconferencia, en la que el único detenido por la muerte de Laura Luelmo se ratificará "íntegramente" de la última versión dada en la que cambia su autoinculpación de la muerte de la joven por la acusación a su exnovia como causante de la misma, según ha informado su abogado, Miguel Rivera.
Tanto Montoya como su exnovia realizarán este careo desde las cárceles en las que se encuentran, el primero desde Sevilla II, en Morón de la Frontera y la segunda desde la cárcel de Huelva.
Rivera ha manifestado que "hubiese preferido" que el careo entre la expareja fuese "presencial" en la sede de los Juzgados de Valverde del Camino, donde sí se personarán las diferentes partes en el proceso y ha afirmado no saber si la exnovia responderá a sus preguntas, ya que está en "su legítimo derecho de no hacerlo".
El 30 de abril Rivera tuvo conocimiento de la admisión a trámite de la petición de la defensa de la puesta en libertad de Bernardo Montoya fundamentada, según informó a Europa Press, en el error de que la primera declaración ante la juez del Juzgado de Instrucción número uno de Valverde del Camino de Bernardo Montoya, en la que confesó la autoría del crimen, no se grabó correctamente al no estar conectado un cable de audio en el equipo informático.
Anterior declaración
En su anterior declaración, que no se grabó correctamente al no estar conectado un cable de audio en el equipo informático, Montoya reiteró en varias ocasiones que “no ha violado ni matado” a Laura Luelmo y que si confesó haberlo hecho fue “por amor” a su expareja que “se lo pidió”, sobre la que ha dicho que es “la autora” del crimen, ya que además el acusado “no estaba en condiciones muy idóneas” cuando se autoinculpó, según la nueva versión que Montoya dio ante la juez.
Igualmente, acerca de otros posibles elementos de prueba, el letrado señaló que su defendido dijo ante la juez que “paró en una gasolinera cuando iba con su expareja”, por lo que se planteó la posibilidad de “pedir la grabación” de las cámaras de la gasolinera, caso de que existiera y no se hubiese borrado.
Además, Montoya señaló que el supuesto arma homicida se encontraría “relativamente cerca” del paraje donde se encontró el cuerpo de la joven, del que Montoya “se deshizo por petición de su expareja, antes de deshacerse de una manta” que fue encontrada por agentes de la investigación, según explicó su abogado.
