Pedro Sánchez ha vuelto a elegir el Palacio de Marismillas, en pleno corazón de Doñana, como lugar de residencia para las vacaciones de verano en compañía de su mujer y sus dos hijas.
Según han confirmado a El Avispero fuentes de su entorno, el presidente del Gobierno en funciones habría decidido ya este privilegiado enclave para disfrutar de su periodo de relax durante las próximas semanas.
Dichas fuentes no han podido precisar la fecha en que Sánchez y su familia se trasladarían a la preciada reserva ecológica ni el tiempo en que permanecerían en ella.
Eso sí, Sánchez está decidido a disfrutar de sus vacaciones de verano suceda lo que suceda entre los próximos días 22 y 25 de julio, fechas en las que se celebrará el debate y votación de investidura.
En cualquier caso, y según informa el digital Esdiario, todo ha de estar listo en Doñana para cuando lleguen Sánchez, su mujer y sus dos hijas y añade que los cuidados de la familia presidencial en su residencia de verano supondrán a las arcas públicas un coste de 157.542 euros.
Dicho diario precisa que ese es el precio del contrato que ha suscrito la Secretaría General de la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas con la empresa afincada en Almonte Forgeser Servicios del Sur S.L., que durante los dos próximos años se encargará del servicio de gobernante y la asistencia hotelera en el Palacio de las Marismillas y en otras casas de la Reserva Biológica de Doñana donde suelen hospedarse investigadores.
De forma permanente, añade ESdiario, un gobernante y dos limpiadoras, pero dadas las necesidades de los ilustres visitantes hay que ampliar la plantilla. Entre otras cosas, cocineros para la familia Sánchez y para los investigadores de las otras casas.
