

Efectivos de la Policía Marítima han intervenido este domingo unos 1.000 kilos de hachís en aguas del Algarve portugués tras una persecución a una narcolancha, desde la que sus tripulantes fueron arrojando al mar una veintena de fardos.
La Policía lusa interceptó esta mañana la embarcación sospechosa, que inmediatamente se dio a la fuga y se inició la persecución.
Los agentes recogieron posteriormente unos 20 fardos de hachís del agua.
La Policía Judicial portuguesa investigará los hechos, que se han convertido ya en habituales en esta zona del vecino país.