Susana Díaz asegura que la ley de la dependencia está "blindada" y es un derecho "incuestionable"

La precampaña electoral sigue su curso. Hoy la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha visitado el centro Cristo Roto de Gibraleón. Una visita muy especial para la presidenta al conocer personalmente la obra del Padre Diego Suárez con los más desfavorecidos, que hicieron ver hace 40 años la importancia de las políticas sociales en las administraciones en el que la ley de la dependencia juega un papel fundamental.

Por esto, Díaz, ha destacado hoy que la dependencia, gracias a la ley, se ha convertido en un derecho "consolidado e incuestionable" para los ciudadanos, que "ha venido para quedarse como la Educación o la Sanidad".

Díaz ha indicado que su primera responsabilidad como presidenta es "cuidar a 8,5 millones de andaluces, pero los que me han de sentir más cerca son los que más lo necesitan, quienes tienen más dificultades, menos oportunidades, aquellos a los que todo en la vida les ha resultado más difícil porque sus capacidades necesitan de ayuda para sentirse iguales".

Por ello, considera que "cuando hay hombres y mujeres, colectivos, entidades y profesionales que entregan todo en su vida, con vocación, para ayudar a los demás, como Obras Cristianas, el Gobierno de la Junta ha de estar a su lado".

Ha apuntado que hace 40 años, cuando Obras Cristianas echó a andar, "no se tenía una Ley de Dependencia como la que se tiene hoy, no había un derecho consolidado como el que hoy tenemos; hoy esta ley es un derecho de cada ciudadano, nadie lo cuestiona, ha venido para quedarse y proteger y amparar a todo el que lo necesite en una etapa de su vida".

Díaz ha recalcado que fueron colectivos como estos, los que hace décadas "pusieron el foco" en estas personas que "tenían menos posibilidades, más necesidades y una desigualdad evidente" e "hicieron entender a la política y a las administraciones que ellas tenían derecho a ser tratados de manera distinta para gozar de la igualdad".

De ahí surgió en Andalucía, el plan de apoyo a las personas con discapacidad con el que "empezaron a detectarse esas necesidades y a cubrirse" con talleres ocupaciones, residencias de estancias completas, de estancia diurna o con los procesos de autonomía de los niños, "desarrollando todo un sistema que fue conformando el Estado del Bienestar".

La presidenta ha recordado que la crisis económica "fue muy dura" ya que hubo que recortar inversiones, sin embargo, "entendíamos que si pese a ella conseguíamos, como se ha hecho, blindar ese corazón de igualdad de oportunidades que era la atención a la personas que más lo necesitan para tener igualdad, que era nuestra dependencia, jamás nadie la iba a poner en cuestión, habría venido para quedarse".

La presidenta ha ido conociendo la gran cantidad de servicios que ofrece el centro de obras cristianas en todos los sectores en los que la junta tiene concertada 185 plazas con una inversión de 3,6 millones de euros.

La asociación de obras cristianas tiene una plantilla de 300 personas trabajando, el 20% de ellas con discapacidad, algo que la presidenta ha querido también destacar como una asociación generadora de empleo de calidad.