Una reducción de 1.513 puestos de trabajo y el cierre de 395 oficinas. Es lo que propone Unicaja Banco con un ERE que llega tras la integración de la citada entidad con Liberbank.
Desde el banco se ha señalado que las causas que le llevan a realizar el ajuste de empleo y oficinas son el deterioro del negocio, la bajada del margen de intereses, la digitalización de la banca y los tipos de interés negativos.
Según ha desglosado el sindicato independiente Cesica, el excedente identificado por la empresa asciende a 1.950 empleados, aunque existe un total de 437 trabajadores de Unicaja pendientes con compromisos de salida, por lo que excluyendo a ese colectivo el total de empleos afectados asciende a 1.513.
La reducción de plantilla afectará en mayor medida a los trabajadores de oficinas. En concreto, Unicaja Banco ha planteado una reducción de 1.005 empleos en el la red de oficinas y de 508 puestos de trabajo en los servicios centrales.
Según informan los representantes laborales, Unicaja Banco ha comunicado durante la reunión su intención de aplicar movilidad geográfica, para preservar el máximo de empleos posible, y de armonizar las condiciones de trabajo entre los empleados de Unicaja Banco y los procedentes de Liberbank, pero sin incurrir en más costes.
También ha anunciado el cierre de 395 oficinas, del total de 1.450 que tiene actualmente.