Las Cartas de Killian: Rectificar es de sabios

Killian

Que difícil es asumir un error o un mal planteamiento en política y por supuesto, más difícil aún es rectificar, incluso cuando saben que algunas de sus propuestas iniciales no tienen sentido o son claramente mejorables. Los partidos y sus dirigentes piensan, que la palabra, los argumentos dados, las razones esgrimidas inicialmente, no se pueden cuestionar, porque eso sería una muestra de debilidad… craso error.

Todos nos equivocamos y todos rectificamos, nadie acierta al 100% y por tanto, es saludable, sano y necesario modificar o corregir , para mejorar un mal proyecto.

Huelva necesita que se pongan de acuerdo los dos grandes partidos, porque hemos tenido iniciativas mal enfocadas desde el principio por ambos, pero nunca se ha dado marcha atrás, a pesar de que las dos grandes organizaciones sabían, que sus planteamientos iniciales no tenían sentido.

Pongamos solo tres ejemplos. El primero: el PSOE y el PP se enfrascaron en una lucha para ver quien traía antes el AVE a Huelva, cuando sabían y saben, que no va a llegar el AVE por distintos motivos: poca distancia a Sevilla (solo 100 kilómetros), no es la solución para el turismo, altísima inversión para tan poco flujo de viajeros…

Ambos partidos comparten, que lo ideal y necesario es: reducir el tiempo a Sevilla con trenes cómodos y modernos de velocidad alta, tener varios enlaces diarios con los AVE a Madrid en varias franjas horarias más atractivas… Y sin embargo, se obcecaron para ver quien ponía “más AVE en los carteles”. Fuego de artificio a sabiendas que nunca lo conseguirán.

Segundo ejemplo: nos empeñamos en un desdoble de la N-435, cuando ni el tránsito hasta Badajoz, ni el enorme coste (más de 1.400 millones de euros), hacía viable la inversión.

Sabían que la opción más sensata es: la mejora de esta vía y que Huelva tenga un enlace con la Ruta de la Plata por Santa Olalla del Cala hasta Huelva, vía Zufre-Zalamea y permitir así, que todos aquellos que vienen del norte de la península, entren a Huelva sin pasar por Sevilla (ciudad que lo engulle todo por su atractivo patrimonial).

Tercer ejemplo: aun sabiendo que las balsas de fosfoyesos tienen su proyecto aprobado y que la única solución es la que es, nuestros dos grandes partidos se dedicaron, en una lucha titánica para ver quien aparece más correcto medioambientalmente hablando, creando una comisión ineficaz, que lo único que ha servido es para eternizar la gran mancha blanca, que tanto daño le está haciendo al turismo y a la agricultura.

Ya es hora de enmendar, de rectificar, de sumar, para avanzar desde la sensatez. Pónganse de acuerdo y vayamos de la mano a la mejora de la N-435 y la A-461 (la primera del Estado y la segunda de la Junta de Andalucia), pidamos trenes y vías del siglo XXI con horarios atractivos que nos haga fácil y cómodo el acceso a Sevilla y a Madrid y enterremos cuanto antes las polémicas sobre las balsas de fosfoyesos, porque todo lo que tardemos en solucionar estos temas, es retrasar nuestro crecimiento.

Huelva ya no puede esperar más. Necesitamos que los dos grandes partidos se sienten y hagan planteamientos posibles para esta provincia.