El “camino del pie y el puño”: cómo el taekwondo llegó a Huelva y conquistó al onubense Fernando Alloza

  • El Club Yoon se ubica en la calle Almonaster la Real, en Huelva.

  • El nombre de esta disciplina proviene de las palabras coreanas "Tae" (pie), "Kwon" (puño) y "Do" (forma de), siendo su significado completo "el camino del pie y el puño".

El taekwondo, arte marcial de origen coreano, es una de las tantas disciplinas que ha permanecido a la sombra, fuera de los focos que apuntaban al conocido como deporte rey que ha obtenido la mayor parte del protagonismo en España. 

Cuando llegó a nuestro país (finales de los años 60), las películas hollywoodienses que detallaban distintas artes marcialesCampeón de campeones (1989), Golpe por golpe (1981) o Kill Bill, con el denominado Kenjutsu  — se convirtieron en el mejor de los trampolines para que el taekwondo comenzara a extenderse por todas las comunidades autónomas, suponiendo la llegada de maestros coreanos que impartirían clases en academias y escuelas. 

Uno de esos maestros, Wan Keun Yoon, se instaló en Huelva, sembrando en el joven Fernando Alloza la curiosidad por darle una oportunidad a un nuevo deporte. “Fui el primer alumno que tuvo. Yo ya practicaba karate, pero me lancé cuando nos dijeron que nos iba a enseñar un maestro coreano. Eso fue en 1976, más de cuarenta años desde que tomé esa gran decisión”, cuenta Fernando. 

En el Taekwondo “se respeta todo”, enfatiza el ahora profesor del Club Yoon Huelva. Compañeros y compañeras, maestro —como lo llaman sus alumnos, que en muchos casos son hijos de padres que también lo fueron— e incluso objetos de la propia sala en la que se entrena. 

Campeonato España junto a Adriana Cerezo, taekwondista que estrenó el medallero en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio
Campeonato España junto a Adriana Cerezo, taekwondista que compitió en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio

Háblame del Taekwondo como disciplina. ¿Qué valores predica?

El taekwondo, a nivel infantil, está recomendado por la medicina internacional porque fomenta la coordinación, el orden o el sentimiento de unión creado entre los niños y niñas que lo aprenden. 

Hay algunos que se sienten solos, que tienen problemas en sus casas, y el deporte se acaba convirtiendo en algo terapéutico para ellos, en una vía de escape de sus conflictos. 

En otros casos, pueden tener hiperactividad o TDAH —déficit de atención— siendo beneficioso para su desarrollo un deporte en el que se enseñan valores como los que promueve el Taekwondo. 

También hay muchos que se acaban enganchando. Yo, por ejemplo, he estado doce años compitiendo. 

Tenemos dos clases: una primera que es la de los niños, que está funcionando cada vez mejor, y después la de los adultos, algo más tranquila pero que también va creciendo.  

¿Qué diferencia al taekwondo de otros deportes?

Como arte marcial, fundamentalmente el respeto por todo en general. La educación se centra mucho en saber valorar al compañero que compite contra ti o contigo. En deportes en los que impera el dinero, eso se ha perdido en cierta parte pero nosotros aún lo mantenemos. 

En el caso del taekwondo, tanto familiares como alumnos que no respeten al contrincante o a los participantes con insultos están automáticamente expulsados. 

Hay que tener claro que aquí se viene a disfrutar con los niños y niñas y, cuando se conviertan en senior, que opten por la opción que más les guste. Yo disfruto mucho con ellos y para mí es la base. 

Concentración en Gerena
Concentración en Gerena

¿Crees que el taekwondo es desconocido en Huelva?

El taekwondo, junto a las artes marciales o deportes que la gente denomina como “minoritarios”, han estado algo invisibilizados por la prensa y medios de comunicación. 

Es conocido aunque no como debiera, pero se ha expandido a través de las artes marciales en general. Ahora, por ejemplo, está muy de moda el kick boxing que es una variante. 

En el caso del boxeo, hubo una serie de medios de comunicación y televisiones que lo levantaron, retransmitiendo el MMA y apareciendo en las pantallas de forma más asidua.  

La Federación Andaluza promueve el taekwondo y ha batido el récord de licencias en España. Además, se están haciendo muchos campeonatos y de hecho hay niños y niñas que están en la selección española. En Andalucía está cogiendo cada vez más fuerza porque también se ha implantado en polideportivos, colegios o asociaciones.

En el caso de Huelva, en la capital solo estoy yo como profesor. En los pueblos hay alguno más.

¿Cómo nace el club?

El maestro Yoon comenzó a homologar los títulos y yo fui su primer alumno. Era primerizo y, además de aprendiz, empecé a ser profesor de la misma escuela. Trabajaba todo lo que podía y él me enseñaba. 

Al cabo de los años, nosotros montamos un pequeño club en La Orden y a partir de ahí empezamos. Eso fue a finales del 1985, estuve hasta el 1995, y seguimos montando gimnasios. 

Obtuve la titulación en Madrid, el título de entrenador, el cinturón negro y el certificado de entrenador nacional. He arbitrado campeonatos como el de España, he ido a doce campeonatos nacionales y he quedado siete veces Campeón de Andalucía, dedicando gran parte de mi tiempo a este deporte que me apasiona. 

Como también disfruto de enseñarlo, he dado clases en muchos pueblos de Huelva como en Valverde, Trigueros, Aracena o en Ayamonte.

Mi objetivo es sacar adelante a los competidores. Uno de ellos es Adrián Luque, que lleva conmigo desde los cinco años y tiene casi trece. Es un niño al que le encanta este deporte, entrena hasta seis días a la semana y se sacrifica mucho. 

Fruto de este esfuerzo ha quedado cuarto de España en el último Campeonato de España (categoría cadete), ha ganado varios Open y cada vez evoluciona más rápido. 

¿Cómo son los entrenamientos?

En los entrenamientos se trabaja bastante el físico por la corta edad del alumnado. Aún así, el taekwondo es muy físico porque las personas estamos acostumbradas a trabajar con los brazos, pero la competición de este deporte está enfocada al 90% en las piernas. 

Es también mental, porque el taekwondo de hoy en día es muy técnico y como arte marcial y deporte de contacto no es lo mismo que pegues mal con la raqueta a una pelota a que te den (o des) un mal golpe. 

A pesar de lo técnico y complejo, el taekwondo cuenta con todas las protecciones y está muy controlado: desde cascos, hasta protección bucal, de antebrazos, espinillera y peto.

De hecho, cuando hay una diferencia en un asalto de doce puntos, el que lleva los doce puntos de ventaja gana. Esta norma tiene como objetivo no avasallar al contrario porque se considera que hay una diferencia muy grande entre ambos. 

A día de hoy, un K.O es muy difícil porque contamos con sensores electrónicos en los pies (patucos) que marcan los toques y que, en función de la patada que se dé, puntúan más o menos al competidor que los lleva puestos. En los patucos hay unos imanes que cuando hacen contacto con casco o peto, automáticamente aparece notificado en un ordenador desde el que los jueces controlan la competición. 

En el dispositivo, aparecerán dos colores: azul y rojo. Si cometes faltas como hablar, caerte, empujar, entre otras, hasta perder cinco puntos pierdes el combate o asalto. Si marcas más de doce puntos de diferencia habrás ganado. 

Campeonato de España
Campeonato de España

¿Próximos proyectos del club?

A finales de este mes, dos niños de la escuela van a ir a una concentración en Mollina (Málaga), que está en un centro de la Federación Andaluza para entrenar con las selecciones. 

A finales de septiembre también queremos ir al Open Don Quijote, en Ciudad Real. Además de crecer en número, en el club y en el taekwondo en general cada vez están entrando más niñas y cada vez las vemos más en los campeonatos.