Viral en redes sociales, José Luis Calero lleva haciendo comedia prácticamente desde que estaba en el colegio: “Era el gracioso de la clase”, admite. Y es que su desparpajo y naturalidad lo han posicionado en pocos años en un lugar privilegiado dentro del mundo del entretenimiento.
Original de Cantillana (Sevilla), el joven comediante se encuentra ahora en medio de la gira de su nueva comedia “Vivir así es morir de humor”, que comenzaba el enero pasado recorriendo toda la geografía española, entre ellas, importantes capitales como Valencia y Madrid, desde donde realiza la entrevista.
Se considera un enamorado de Huelva y de su gente. De hecho, esta es la segunda vez que viene a representar el show, que hizo lleno absoluto el pasado mes de mayo “y se quedó mucha gente sin poder venir a verlo”. Por eso, repite de nuevo en las Cocheras del Puerto, donde promete repetir la hazaña este viernes 3 de noviembre.

¿Cómo empezaste en el mundo de la comedia?
Todo esto empieza cuando estaba en cuarto de la ESO, que iba a hacer el típico baile de la graduación de fin de curso para representar el musical del Rey León con mi clase. Pero el día antes de la graduación la clase entera dijo que le daba vergüenza actuar delante de los padres. Nuestra tutora cogió un cabreo monumental y, en ese momento, a mí y a mi compañero de pupitre -que era imbécil como yo- (se ríe) se nos ocurrió la idea de hacer un monólogo en su lugar.
Yo era el gracioso de la clase, siempre estaba más fuera que dentro, porque en todas las clases me echaban por hablar y hacer monólogos.
Ahí empezó la broma: me subí al escenario en el Polideportivo de mi pueblo de Cantillana ante 400 personas. Salió muy bien, fue un boom en el pueblo y también me llamaron del pueblo de al lado. Después me pidieron actuar en la feria de Cantillana en la Caseta Municipal… así fue empezando todo.

¿Fue difícil para ti hacerte un hueco en este mundo del entretenimiento?
Hay mucha gente que quiere empezar en la comedia y creen que los comediantes hemos llegado directamente a los teatros. Entonces a mí siempre me gusta contar que todos hemos pasado antes por bares, por salas y por sitios con poco público.
Yo estuve de gira con el Club de la Comedia como presentador. Presentaba a los comediantes en auditorios muy grandes pero, claro, yo no vendía entradas, por así decirlo. Antes de que ellos saliesen, hacía cinco minutos de un monólogo mío, pero a mí no venía a verme nadie porque no era conocido.
Después fue cuando empecé con las redes sociales, pero antes yo ya había actuado en salas y bares. Por eso mi consejo si alguien se quiere dedicar a esto es que no se desanime y que siga intentándolo y, sobre todo, disfrutándolo, porque esa es la clave para llegar.

¿Qué destacas del show "Vivir así es morir de humor"?
Este show no es un espectáculo al uso. El espectador siempre se sorprende mucho porque es algo muy distinto a lo que se ve en las redes sociales. De hecho, todos los textos de los espectáculos son inéditos.
Además, no es la típica comedia de taburete, foco y micrófono, sino que es un espectáculo que lleva muchos efectos sonoros y lumínicos; una puesta en escena que la gente no se espera en un espectáculo de humor.
También durante el espectáculo el público interactúa con el show, siendo partícipe e incluso protagonista, y eso es algo que me gusta mucho.

¿Qué te gusta más de Huelva?
Estoy enamorado de Huelva, del Recre y de su gente.
Me encanta su gastronomía y las playas de Huelva. Me gustan mucho las gambas, el jamoncito y los vinos. Y siempre he veraneado en la zona del Portil de Cartaya.
También soy un gran forofo del Recre desde que era pequeñito; la primera vez que fui a Huelva fue exclusivamente para ver el Colombino, un momento que viví con mucha ilusión. Y en mi casa de Sevilla tengo hasta un banderín del Recre colgado en mi dormitorio, porque siempre he sido un enamorado del Recreativo de Huelva.