El Virus del Nilo Occidental (VNO) vuelve a poner en máxima vigilancia a la provincia de Huelva tras detectarse su presencia en un caballo localizado en La Palma del Condado, según confirma la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, a través de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica.
Además del caballo afectado en La Palma del Condado, se ha detectado en la provincia sevillana un caballo en Almensilla (Sevilla) y otro en Sevilla capital por parte de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural.
De momento no se registran contagios humanos en Huelva a pesar de que la provincia de Sevilla cuenta ya con nueve contagios: dos personas en Los Palacios y Villafranca, otras tres de Dos Hermanas, otro par de Coria del Río y otro en La Puebla del Río; aunque seis de ellos ya se encuentran dadas de alta.
En su informa Salud explica que ha detectado la presencia de VNO en las capturas realizadas entre el 23 al 31 de julio en los municipios sevillanos de Almensilla, Villamanrique de la Condesa, Bollullos de la Mitación y Utrera y en Montalbán (Córdoba).
Como resultado de la integración de las vigilancias, Salud Pública comunica también que la Estación Biológica de Doñana de CSIC ha localizado también presencia de VNO en mosquitos capturados en los municipios sevillanos de La Puebla del Río, Coria del Río y Palomares del Río.
Desde la administración andaluza han comunicado a los responsables municipales las actuaciones de salud pública que deben adoptar según lo previsto en el Programa de vigilancia y control integral de vectores transmisores de FNO en Andalucía para reducir de forma relevante las probabilidades de transmisión a la población.
¿Cómo se transmite?
La infección por el Virus del Nilo Occidental (VNO) es una zoonosis transmitida por mosquitos del género Culex cuya enfermedad afecta a países del sur, este y oeste de Europa.
El virus se transmite entre las aves a través de la picadura de mosquitos infectados siendo éste su ciclo natural. De esta manera, los humanos y otros mamíferos pueden infectarse de forma colateral, sin que desde ellos se produzcan nuevas transmisiones. según señalan desde Salud.
Alrededor del 80% de las infecciones por el VNO en humanos son asintomáticas, aunque la Fiebre del Nilo Occidental (FNO) es la presentación clínica más común. No obstante, los ancianos y las personas inmunocomprometidas corren un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad neuroinvasiva del Nilo Occidental.
Desde Salud y Consumo se insiste en la necesidad de que la población mantenga las medidas preventivas para evitar picaduras de mosquitos en las horas de mayor actividad de las especies transmisoras de esta enfermedad (en horas de cercanas al amanecer y posteriores al atardecer), tanto individuales –uso de repelentes registrados de uso tópico y ropa clara y que cubra la mayor parte de la piel–, así como domésticas –uso de mosquiteras o repelentes ambientales– sobre todo para la población vulnerable con inmunidad comprometida.
En estas recomendaciones hay que incluir evitar las acumulaciones de agua peridomésticas (jardines, macetas, útiles etc.) para evitar que sean usadas para el desarrollo de larvas de mosquitos, como el conocido mosquito tigre.